domingo, 9 de diciembre de 2012

Comunidades de Villa y Tierra de Pedraza y Villa y Tierra de Sepúlveda

A partir de una documentación que me hizo llegar mi amigo Jose, otro enamorado de estas tierras, podemos describiros algunos de los monumentos imprescindibles de las Comunidades de Villa y Tierra de Pedraza y Villa y Tierra de Sepúlveda...

En el mapa que incluimos a continuación podemos situar dichos monumentos, los pueblos que los acogen, los caminos a seguir para visitarlos...





Empecemos por los monumentos de la Comunidad de Villa y Tierra de Pedraza...

Castillo de Pedraza. PEDRAZA
El castillo de Pedraza es una fortaleza que data del siglo XIII y que se reedificó en el siglo XV por García Herrera. A principios del siglo XVI los Duques de Frías, Condestables de Castilla, lo reformaron de nuevo, añadiéndole el gran muro defensivo adherido a la torre del homenaje y el muro exterior dotado de cañoneras y un puente levadizo (hoy desaparecido). El castillo cuenta con una imponente torre del homenaje, foso y está rodeado en la mayoría de su perímetro por un precipicio.


Ermita de las Nieves. VALDEVACAS
En un altozano entre campos de labor se encuentran las ruinas de uno de los monumentos más singulares de la comarca. Poseía tres naves separadas por grandes arcos; aún podemos observar los bellísimos capiteles de motivos vegetales y animales. Conserva dos portadas casi iguales decoradas con motivos de zigzag en relieve. Su repertorio escultórico cuenta con centauros, aves, hombres y mujeres en diversas posturas. 


Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. ALDEALUENGA
Iglesia de esbelta torre y tres ábsides semicirculares. Los 3 ábsides presentan arcos ciegos, siendo dobles en la capilla mayor.


Iglesia de Nuestra Señora de las Vegas. REQUIJADA
Tiene tres naves cubiertas por madera con cabecera triabsidal de tambor en el interior. En el exterior, los ábsides laterales presentan caras planas, y el central liso con un sencillo ventanal. La torre cae sobre el del Evangelio y de sus dos cuerpos, el superior, no es el original al tener que rehacerse en 1756 por amenazar ruina.
La galería porticada es la pieza más espectacular de la Ermita de Nuestra Señora de las Vegas. Tiene la más pura distribución románica de siete arcos separados en dos tramos de tres y cuatro por una puerta de dos arquivoltas con guardapolvos sobre jambas.


Iglesia de San juan. OREJANA
Levantada en los últimos períodos del románico, siglo XII o comienzos del XIII, el edificio actual es fruto de las numerosas transformaciones sufridas, pudiendo distinguirse tres etapas constructivas.
A la primera época responde la cabecera que es parte más antigua de la iglesia, siglo XII o comienzos del XIII, de los siglos XVI y XVII, son los arcos formeros que separan las dos naves de la iglesia, mientras que el pórtico y la torre pertenecen al siglo XVIII, época en la que el templo sufre importantes transformaciones, como la conversión del atrio porticado en una tercera nave con cabecera habilitada como sacristía. Una última restauración llevada a cabo entre 1981 y 1983, elimina esta tercera nave devolviendo al templo su primitiva imagen.
El pórtico, labrado en tierra caliza, constituye uno de los conjuntos escultóricos más ricos del románico segoviano. Presenta en su lado sur, una serie de ocho arcos de medio punto, originariamente sobre columnas geminadas, uno de los cuales, el que sirve de acceso al atrio, es apuntado. Los capiteles componen una de las series iconográficas más interesantes del románico en piedra de la provincia.



Iglesia de San juan. PEDRAZA
Es la única de las siete ermitas del siglo XII que se mantiene abierta al culto. Conserva parte de la primitiva traza románica, como el ábside y la torre, aunque la mayor parte del edificio actual corresponde a las obras realizadas en el siglo XVI, y posteriores reformas en los siglos XVII, XVIII y XIX. Conserva en su interior una bella pila bautismal de estética románica. En la base de la torre se encuentra el curioso Balcón Verde, construido por Juan Pérez de la Torre y Zúñiga para contemplar los festejos taurinos celebrados desde antiguo en la Plaza Mayor, ya que dicho caballero habitaba una casa de la calle Real, sin vistas a la plaza.


Iglesia de San Juan. SANTIUSTE DE PEDRAZA
Sobre el casco urbano de la villa destaca la fábrica de su iglesia parroquial de San Juan Bautista, que en otra época estuvo dedicada a los santos niños Justo y Pastor. Se ve claramente que en origen fue un edificio románico pues conserva su ábside semicircular que ha sido recientemente rehabilitada. De esta época románica también lo es la pila bautismal que se instala en el jardín de acceso al templo. El interior del templo se reparte en una sola nave que se cubre con yeserías barrocas y que adorna su presbiterio con un retablo de la misma época. Esta iglesia parroquial de Santiuste guarda en su interior un Cristo románico del s. XII, junto con una cruz procesional de plata realizada en Segovia en el siglo XVII.


Iglesia de San Justo. SANTIUSTE DE PEDRAZA (LA MATA)
Ruinas de la iglesia románica de los santos Justo y Pastor, está situada en lo alto de un cerro, junto al cementerio del municipio y divisable desde lejos. Debido a un incendio que causó parte de su derrumbe, hoy sólo quedan en pié el ábside semicircular y su notable torre cuadrada de dos cuerpos, el inferior de mampostería y el superior de un buen sillar.



Martinete. NAVAFRIA
El Martinete de cobre de la Familia Abán es una supervivencia tecnológica medieval en tierras segovianas. Pertenece a una larga dinastía de caldereros de cobre. El cobre fue el primer metal empleado por el hombre, pero su uso empezó a generalizarse con el descubrimiento de la técnica de su fundición hacia el año 3.500 a. de C, en Caldea y Egipto.
Puedes verlo en detalle si entras aquí.


Monasterio de Santa Marta. COLLADO HERMOSO
Monasterio cirtesciense en ruinas. En fachada principal encontraremos una portada apuntada con arquivoltas de dientes de sierra y puntas de diamantes y un gran rosetón vacío.


Y sigamos con los de la Comunidad de Villa y Tierra de Sepúlveda...


Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. DURATON
De planta y estructura habitual, el templo de Duratón no es de grandes dimensiones: dieciocho metros de largo por nueve de ancho, pero destaca sobremanera el sentido unitario de la construcción y la elegancia de los volúmenes arquitectónicos y delicadeza de su escultura.
La galería porticada tiene dos tramos de cuatro y seis arcos separados por el ingreso, con rica estructura de tres arquivoltas, la inferior polilobulada. Las columnas dobles que soportan los arcos presentan una serie de capiteles de magnífica factura siendo reconocible la presencia de varios artistas.



Iglesia de San Vicente. PELAYOS DEL ARROYO
La iglesia parroquial, dedicada a San Vicente Mártir, es un ejemplo de románico rural segoviano y se construyó entre los siglos XII y XIII. Fue reformada repetidas veces, incluyéndose una espadaña en el ábside original. Cuenta con restos de pinturas murales, un retablo barroco y destacados capiteles, así como una notable portada.

Iglesia de San pedro ad Vincula. PERORRUBIO
Templo románico perteneciente al taller que se inicia con la iglesia de Duratón. Por lo tanto, ha de fecharse en el S. XIII. Consta de una única nave con cabecera cuadrángular. Al norte se adosa la torre mientras que una elaborada galería porticada recorre los muros sur oeste.



Iglesia de San Salvador. SEPULVEDA
Es la iglesia más antigua de Segovia realizada en estilo románico (siglo XI). Tiene tallas de canecillos y capiteles que recuerdan por su rudeza un arte más antiguo, prerrománico. Consta de una nave, prebisterio y ábside con columnas y ventanales. La galería es fortificada y la torre tiene ventanales ajimezados.


Iglesia de la Virgen de la Peña. SEPULVEDA
Es una iglesia románica del siglo XII única en toda la provincia de Segovia. El motivo es su portada con tímpano. Está decorado con un Pantocrátor y Tetramorfos, ángeles sosteniendo un Crismón, 24 ancianos y otras figuras.

Iglesia Santa Marta del Cerro. SANTA MARTA DEL CERRO
Sobre el casco urbano de la villa destaca la iglesia románica de santa Marta, edificada en el siglo XIII y cuya planta se distribuye en una sola nave, con cabecera semicircular y torre campanario adosada a un costado. En la parte exterior del templo podemos contemplar un buen repertorio de canecillos figurados que recorren la cornisa del templo, donde veremos representados músicos, sacerdotes, obispos, abades, animales, e incluso algunos personajes en actitudes obscenas. Ya dentro del templo también podemos ver su cabecera, donde en el arco triunfal se instalan dos buenos capiteles esculturados con sirenas pájaro y la Huida a Egipto. A ellos hemos de añadir su pila bautismal románica, el pulpito de piedra barroco y varios retablos de la misma época, destacando el mayor, junto a una importante colección de piezas de plata entre las que sobresalen la cruz procesional y una caja hostiario, ambas realizadas en Segovia en el primer tercio del siglo XVI.

Iglesia de San Pedro de gaíllos. SAN PEDRO DE GAÍLLOS
La iglesia de San Pedro de Gaíllos, situada al sur de Sepúlveda y en el centro del pueblo de este nombre, sólo conserva de su estructura original el ábside y el pórtico o galería típica de las iglesias segovianas románicas. Este templo parece una réplica en pequeño de la de Duratón. La iluminación que proporciona las aberturas del ábside a modo de saeteras las enmarcan pequeños arcos de medio punto apeados sobre columnas, también de muy pequeño tamaño, con sus correspondientes capiteles.  Remata el paramento absidial un alero, sostenido por canecillos en curva y en recta de una cenefa taqueada en bastante buen estado de conservación. Las puertas del pórtico tanto la meridional como la oriental, repiten en sus respectivas arquivoltas la decoración en zig-zag separadas por boceles, así como también la moldura que las remata o chambrana  que,  están decoradas a la altura del salmer con unas pequeñitas cabezas humanas. 
Iglesia de San Miguel Arcángel. SOTOSALBOS
La Iglesia de San Miguel Arcángel es una de las iglesias románicas más bellas de la provincia de Segovia. Fue construida en el siglo XII.
Destaca su Galería Porticada, típica de esta zona, por la decoración y número de sus capiteles.
La iglesia tiene una sola nave con ábside semicircular, torre y una magnífica galería porticada de siete arcos, tres apuntados y cuatro de medio punto.Destaca este pórtico, cuya cornisa aparece decorada con canes, metopas, etc. En el interior destacan las pinturas al fresco, una pila bautismal y la escultura gótica de Nuestra Señora de la Sierra.

Castillo de Castilnovo. VILLAFRANCA

El origen del castillo está todavía en la penumbra. Algunos investigadores lo atribuyen a Abderraman I, quien lo fundaría en el siglo VIII. Otros investigadores se inclinan por atribuírselo a Almanzor en el siglo X. Lamentablemente no quedan restos de esa época tan remota. En los siglos XII y XIII datamos los arcos apuntados del lado Oeste del Patio de Armas. Posteriormente, se fueron adosando las seis torres: Solana, Puerta y Vieja, y más tarde las del Moro, Caracol y Álvaro de Luna.1 Las últimas reformas se remontan a los siglos XIX y XX.
Alojó a los reyes de Aragón, Fernando I y Leonor. Posteriormente Juan II hizo entrega del mismo a su valido, Álvaro de Luna. A la muerte de éste, Enrique IV entregó Castilnovo a Juan Pacheco.
Es adquirido posteriormente, junto con una gran extensión de terreno a su alrededor, por Fernando el Católico, creando así el Condado de Castilnovo para ser cedido como dote a su nieta Juliana Ángela de Velasco y Aragón, primera condesa de Castilnovo, en 1557.
En el siglo XVI alojó a los hijos del rey de Francia, Francisco I, como rehenes, tras la Batalla de Pavía.
En 1859 el príncipe alemán de Hohenzollern, su propietario, se lo vendió a José Galofre, secretario y pintor de Cámara de la reina Isabel II. Fue restaurado en el siglo XIX.


Iglesia de San Frutos de Duratón. VILLASECA
La iglesia se construyó en el año 1100. Se encuentra sobre restos de construcciones romanas. Su construcción está atribuida a un monje llamado Michael siendo el Abad Fortunio. Consta de una sola nave de 8 metros de ancho con dobles arquerías ciegas a sus lados que se levantan sobre pequeñas columnas y se cubre por una bóveda de cañón en tres tramos y arco de triunfo rebajado, al fondo de la nave esta el ábside.3 Su acceso se realiza a través de dos puertas, la del lado norte es la principal, la otra está tapiada. Esta formada por tres arquivoltas y guardapolvo. Las arquivoltas apoyan en cimarios adornados con motivos vegetales y en piletas lisas. Todo el conjunto sobresale del plano de la fachada. Sobre él se abre una ventana que se forma con un arco de medio punto apoyado en columnillas con capiteles exentos de decoración. El arco tiene un guardapolvos ajedrezado y baquetón liso. Hay que destacar una colección de 14 capiteles con ornamentación vegetal y escenas mitólogicas. Ha sufrido varias remodelaciones que han afectado al ábside además de dos añadidos laterales. Bajo el altar hay un sillar que recibe el nombre de piedra del santo; la tradición dice que si se dan tres vueltas (el paso es muy estrecho) se cura la hernia y con menos vueltas desaparecen los dolores.2
El templo se reformó en el siglo XII con tres nuevos ábsides semicirculares, pero no fue hasta comienzos del siglo XVIII cuando se realizaron obras importantes en el interior de la iglesia. Se hizo un retablo nuevo para el altar de San Frutos y se trasladaron allí sus reliquias. Unos años más tarde se construyó la capilla nueva para el santo.
El 18 de junio de 1126 el rey Alfonso VII de León concedió fuero para poblar el monasterio de San Frutos y confirmó la anexión de este lugar al monasterio de Santo Domingo de Silos. La presencia de los monjes benedictinos se mantuvo hasta que se vieron obligados a abandonar las instalaciones debido a la desamortización de Mendizábal en 1834.2 El abandono y un incendio ocurrido en el siglo XIX acabaron llevando a la ruina al monumento. En junio de 1931 fue calificado como Monumento Nacional.



Cueva de los siete altares. VILLASECA
La Cueva de los Siete Altares es una gran cavidad natural sobre la que trabajaron los hombres del neolítico, tal vez los primeros iberos, con sus hachas de piedra para mejorar esas sus primitivas habitaciones, y sobre todo para dedicarla a templo de su espíritu en la más alta concepción para ellos, en su superior culto a los muertos; el hombre neolítico, que comenzó viviendo en los abrigos y cuevas naturales en aquella época de temperatura templada y húmeda, que sucedía al frío seco de la Magdaleniense, sale de aquéllos, como de los antros de las cavernas, llevándose de la naturaleza la idea de la bóveda, de los muros, de los pilares, y discurriendo por las radiadas galerías la noción del hipogeo, y, así, reformando las cuevas naturales, tantas dedicó a panteones, los que pretenden surgieron de los dólmenes con galería.



Cueva de los Enebralejos. PRADENA
La cueva de los Enebralejos está situada en las proximidades de Prádena, en la provincia de Segovia. Con sus 3.670 m de longitud es la cavidad de mayor desarrollo conocido en el borde norte del Sistema Central. La cueva está estructurada en tres pisos: galerías altas, medias y bajas o del río, presentando un desnivel de sólo 13 m. Cabe destacar su gran valor desde el punto de vista arqueológico, espeleológico y turístico, además de su importante valor estético.  
La cueva se localiza en el karst de Prádena, desarrollado sobre dolomías y calizas de edad mesozoica, las cuales constituyen la cobertura alpina de esta región. La cueva de los Enebralejos está desarrollada en las dolomías del Cretácico superior pertenecientes al Santoniense (entre 87 y 83 m.a.).


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario